Un año más por el Día Internacional de la Mujer, el barrio de la Mina vuelve a reunir esfuerzos para reivindicar la igualdad entre hombres y mujeres. Organizado por la red comunitaria pebMINA, este jueves se realizaron los actos conmemorativos que recuerdan la lucha de las mujeres a lo largo de los tiempos y el compromiso de continuarla.
El manifiesto que este año ha preparado el alumnado de secundaria del Colegio Amor de Dios, apela a la juventud a ser el motor para llegar a ser una sociedad realmente igualitaria, sin desigualdades ni injusticias a las mujeres. Dicen, "no podemos quedar en silencio, debemos actuar", y añaden que hay que "romper las barreras que nos dividen y trabajar por un mundo donde la igualdad sea la norma y no la excepción".
Que cada uno pueda ser el que más desee
Rechazan cualquier forma de violencia o discriminación hacia las mujeres y los estereotipos que les niegan las mismas oportunidades. Defienden que “las chicas pueden ser científicas, futbolistas o líderes, y los chicos bailarines, cuidadores o maestros sin prejuicio alguno”. Y reivindican el poder individual de cada uno para “hacer pequeñas acciones que generen un gran impacto, como por ejemplo,- dicen- no permitir comentarios, actitudes o bromas que desprecien a las mujeres oa cualquier persona”.
En torno al porche del Espacio Cultural Font de la Mina, en previsión de una lluvia que no llegó, hubo cuenta cuentos para los niños que hablaban de la igualdad entre las personas, talleres que hacían pensar sobre cuestiones de género y las discriminaciones que todavía arrastra nuestra sociedad hacia las mujeres. Tras la lectura del manifiesto sonaron los timbales festivos de la batucada y el encuentro acabó con un bingo musical que mantuvo la tensión hasta el final.