La Bienal europea, MANIFESTA15, ha reunido a los antiguos trabajadores de la Central Térmica de las Tres Chimeneas, en una jornada emotiva y reivindicativa de los años de lucha para las mejoras laborales en la fábrica, como dicen ellos.

Han regresado a un edificio que ya no humea y que, además de ser el elemento que sitúa a Sant Adrià de Besòs en el skyline del área metropolitana de Barcelona, ​​es ahora la sede de una muestra colectiva de trabajos artísticos y de una exposición que es un homenaje a la vida sociopolítica de aquella época en el Besòs.

El acto de reencuentro empezó en el exterior del recinto con el homenaje al compañero, Manuel Fernández Márquez. Un joven llegado a Catalunya desde Extremadura fallecido por la policía en una de las huelgas organizadas por los trabajadores. Se leyó un escrito y un poema en su memoria y de reconocimiento a su lucha y sacrificio. Una vez dentro de la instalación, uno de los antiguos trabajadores recordó cómo era la vida en la fábrica y repasó la historia reivindicativa liderada por la plantilla de la Central térmica.

  

Y, a continuación, visita a todos los rincones de esta inmensa estructura de la arquitectura industrial que inspira artistas y que, quizás ahora, después de la Bienal, encontrará su lugar como espacio para acoger y materializar un proyecto vinculado al arte y la creatividad. Una vez clausurada en 2011, las iniciativas sobre qué hacer con ella fueron desde querer derrocarla a intentar convertirla en un polo de atracción para la cultura y las artes. Por último, fue indulta y, ahora, gracias a la Bienal se muestra por primera vez al público y reúne a sus antiguos "habitantes". La jornada concluyó, ya de noche, con un brindis a la salud de los presentes y de los que ya no están.

Le mostramos la jornada en una galería de imágenes.

   

  

  

   

  

Consorcio del barrio de la Mina